06 Jun Consagrados para sembrar la paz y el bien: Seglares Capuchinos
II CONSAGRACIÓN DE SEGLARES CAPUCHINOS DE LA MADRE DEL DIVINO PASTOR EN COSTA RICA.
La Hna. Isabel Varela, acompañante de la Comunidad San José, Costa Rica nos comparte la siguiente noticia.
El pasado 10 de mayo, día de nuestra Inmaculada Pastora, se consagraron a Ella tres miembros de la comunidad “SAN JOSÉ” de Costa Rica: El matrimonio formado por Ronald Pereira y Viviana Chavarría, de Costa Rica y Raidel Cuella, de Cuba. Damos gracias a Dios por el regalo de darnos hermanos y por el deseo que ha puesto en algunas personas de vivir su opción de vida desde el estilo capuchino propio del beato José Tous. María, Madre del Divino Pastor sigue atrayendo ovejas para que estén más cerca de su hijo.
Les he pedido a ellos que escriban un poquito sobre su experiencia y a continuación transcribimos lo que ellos han enviado:
«Como lo hizo María»
Queridos hermanos y hermanas: Paz y Bien.
Quisiera compartir con ustedes unas palabras inspiradas en el canto “Como lo hizo María, que su mensaje escuchó”. Después de un tiempo de formación y de haberme sumergido en la espiritualidad franciscano-tousiana, he tenido la gracia de compartir este camino con hermanos de diferentes países, todos animados por el mismo ideal. En este proceso, hemos sido llamados a dar un paso más en nuestro seguimiento de Jesús: nuestra consagración.
Para mí, ha sido una inmensa gracia de Dios formar parte de esta familia. Poder caminar junto a mis hermanos en la misma vocación es un don que valoro profundamente. Mi respuesta, aunque pequeña frente a las gracias que Dios me regala cada día, es un «sí» que se renueva continuamente. Como nos dijo el fraile en la homilía: ese «sí» se expresa en pequeños pasos de seguimiento a Cristo, sostenidos por la oración y la fraternidad.
Agradezco de corazón la acogida que recibí de las hermanas de Costa Rica, tanto de la comunidad del juniorado como del noviciado. Me sentí como en casa. Fue muy especial compartir con hermanas que han sido parte de diferentes momentos de mi vida, y también con aquellas que no conocía, pero cuya cercanía hizo sentirnos como si nos conociéramos de siempre. ¡Gracias, Señor, por el don de la fraternidad!
También quiero expresar mi gratitud por la Eucaristía vivida, cargada de sentimientos y emociones. Desde la decoración, los cantos, las moniciones, las palabras del fraile y la compañía de los hermanos seglares, todo fue una verdadera fiesta de la Divina Pastora, que acogía con júbilo a todas sus ovejas bajo su manto.
Gracias, Madre, por permitirme ser tu hijo. Gracias por guiarme hacia Él. Gracias, Padre Tous, por inculcarnos la fe y la confianza en Dios incluso en medio de las adversidades. Hoy, con humildad y alegría, me atrevo a decir, como lo hizo María: doy mi “sí” generoso y acepto con amor su misión.
Con gratitud y fraternidad,
Raidel Cuellar.
“Paz y Bien. La consagración a la Madre del Divino Pastor nos acerca más al Señor Jesús. Ha sido una preparación que nos ha acercado más al Señor, a los hermanos y hermanas, por medio de encuentros fraternos de formación cristiana/franciscana y el compartir en la mesa común. La invitación de la Madre es siempre como en las bodas de Caná: «Hagan lo que él les diga» (Jn. 2, 1-11). Ahora estamos más invitados que nunca a seguir a Jesús, como lo hicieron san Francisco y el P. Tous, mediante la fraternidad, la oración, la escucha atenta y la observación constante de los valores del Evangelio”.
Ronald Pereira.
“La forma en que percibí la Consagración es resumida en un Pentecostés, todos reunidos, la homilía llena del Espíritu Santo. Este momento tocó las fibras de mi alma y me hizo renovar y recordar mis sacramentos en especial el del matrimonio.
Y, sin lugar a dudas, un compromiso en la misión y ejemplo donde me encuentre: «Vivir de tal manera que al verme otros quieran conocer a Jesús» «Predica el evangelio en todo momento y si es necesario usa las palabras» San Francisco de Asís.
Seamos evangelio viviente que no nos dé miedo ni vergüenza demostrar que Cristo vive en nosotros y que TODOS estamos en las manos de Dios. “Por lo tanto el mal no prevalecerá» Su Santidad León XIV.
Viviana Chavarría.
“Y esta vida que brota de la fecundidad del carisma, somos llamadas a compartirla, a ampliar los horizontes, a dejar que fluya y se expanda, como María en la visitación: fecundada por el Espíritu, lleva enraizada en su vientre la vida que le ha sido entregada; y esta misma vida la lleva a salir al encuentro del prójimo, a ensanchar su tienda porque ha germinado nueva vida al calor del Espíritu. De la misma manera, del carisma del beato José Tous ha germinado la FAMILIA TOUSIANA: el carisma vivido en comunión por hermanas y laicos”.
(Documento Base, XXV Capítulo General)
CONSAGRACION DE SEGLARES CAPUCHINOS DE LA MADRE DEL DIVINO PASTOR EN CUBA
La Sra. Elsy Caballero, presidente de la Fraternidad de Seglares Capuchinos de la Madre del Divino Pastor en Cuba, nos ha enviado el siguiente escrito que a continuación transcribimos:
“En la mañana de hoy, 31 de mayo, con profundo recogimiento y gratitud, se celebró una solemne Eucaristía en el Santuario Diocesano de Nuestra Señora de la Caridad, con motivo del 175 Aniversario del primer colegio del Instituto de las Hermanas Capuchinas de la Madre del Divino Pastor y el 200 Aniversario del nacimiento de la Madre Remedio Palos Casanova.
Durante la ceremonia fueron consagrados siete aspirantes que, tras dos años de formación, han dado un paso significativo en su camino espiritual. Ellos son: Magalys Cueto, Giraldo Rodríguez, Maité Espinosa, Bertha Fernández, Teresa Machado, Rafael Marín y Luis Daniel Almeida. Asimismo, se realizó la renovación de la consagración de los Seglares y la renovación de votos de las Hermanas Capuchinas de nuestra Comunidad, reafirmando su compromiso de entrega y servicio.
Demos gracias a Dios por el legado de amor, entrega y servicio que han dejado quienes han sido parte de esta obra y por la oportunidad de seguir construyendo, con fe y esperanza, el camino trazado por nuestros fundadores”.
“Del carisma del beato José Tous ha germinado la FAMILIA TOUSIANA: el carisma vivido en comunión por hermanas y laicos.
Es un compromiso con la Iglesia que supone un cambio de mentalidad, cuya raíz es la fidelidad al don recibido, la cual nos empuja a compartirlo con los laicos: miembros de las comunidades educativas y misioneras y, en general, toda persona que busque crecer en su fe y considere que el carisma tousiano es un medio para profundizar espiritual y apostólicamente”.
(Documento Base, XXV Capítulo General)






