MDP Sabadell: Bondad en acción.
Durante este año en que nuestro Padre Fundador nos acompaña de manera especial con el lema: “José Tous: BONDAD en acción”, nuestro colegio está llevando a cabo diferentes actividades, encaminadas a dar a conocer su figura y su vivencia de fe, plasmada en obras concretas de bondad.
A continuación, compartimos algunos trabajos realizados por los alumnos. En primer lugar, unas cartas dirigidas al Padre Tous y, seguidamente, unas experiencias personales que hacen referencia a la propuesta de vivencia y profundización llevada a cabo durante el tiempo de Cuaresma.
Esta segunda actividad consistió en apadrinar ancianos de dos residencias cercanas al colegio. Participaron todos los alumnos, desde cero años hasta cuarto de ESO. Cada alumno tenía asignado un anciano/a. Han rezado por ellos y les han obsequiado con un detalle.
Ha sido una experiencia muy enriquecedora y muy valorada, tanto por las residencias como por las familias del colegio.
Comunidad de Sabadell
Estimado Padre Josep Tous:
Cómo me gustaría poder conocerlo. Seguro que usted fue un buen hombre: bondadoso, de confianza, generoso y con muchas otras virtudes. Su bondad fundó nuestra escuela, que ahora acoge a muchos niños y niñas que tienen ganas de aprender, dispuestos cada día a amar y trabajar por convertirse en hombres y mujeres de provecho, como usted. Le agradezco mucho el esfuerzo que dedicó para que muchos niños y niñas tengan un corazón grande y abierto a Dios. Este año que celebramos su 150 aniversario, le pido que siga en nuestro corazón. Aquí me despido. Hasta luego. (Eduard).
Querido Padre Tous
Mi nombre es Sara Sanjuan Fernández y le escribo para darle las gracias. Gracias por fundar las escuelas de la Madre del Divino Pastor, gracias por enseñarme que tengo que ser buena persona, gracias porque todo y sufriendo persecución nunca se echó atrás. En resumen, gracias por todo. ¿Y por qué por todo? Pues, porque sé que ser una persona tan bondadosa es difícil y se requiere trabajar. ¿O no? Es obvio que es difícil. Yo sé que no es nada fácil perdonar en según qué momentos. Sé que cuesta hacer las faenas de casa sin ser perezosa (a mí sinceramente me cuesta). Pero si una persona es bondadosa, no debe esforzarse tanto porque le sale del corazón. A veces es mucho más dar que recibir. Perdonar te reconforta mucho y te une más a Dios. He reflexionado pensando en usted, por tanto, gracias una vez más, por inspirarme a hacer las cosas con amor. (Sara).
Durante la Cuaresma, hemos hecho un bonito detalle para los abuelos y abuelas de dos residencias. Me he sentido feliz porque cuando lo reciban les hará mucha ilusión saber que una niña, en mi caso, se ha preocupado y esforzado en hacer un bonito detalle para ellos.
Me ha gustado hacer esta actividad. La abuela a la que he apadrinado se llama María. Espero que le guste, ya que yo, lo mismo que todos los de mi clase, nos hemos sentido orgullosos de poder hacer este acto de bondad. (Dalia).
Durante la Cuaresma he hecho un trabajo para José. Le he hecho una postal y una flor de papel. Me he sentido genial haciendo esta actividad ya que, a lo mejor, hace mucho tiempo que no recibe ningún regalo y con esto espero haberle animado. (Christian).
Me he sentido muy bien al pensar que Eleuteria (así se llama la abuelita que me tocó apadrinar) se pondría muy contenta y que eso es maravilloso. Es una experiencia única. Esta postal está hecha con cariño y puse mucho empeño para que saliera bien. Espero que ella y los otros ancianitos sepan que hay mucha gente que piensa en ellos y que desean que estén muy bien y que sean felices. (Julia).
Durante esta Cuaresma he estado haciendo manualidades para una abuelita que me tocó. Se llama Ana. Haciendo la postal me he divertido un montón. He aprendido a escribir una postal con lo que te sale del corazón y, sobre todo, he aprendido a amar a gente que no conozco de nada. Yo creo que estas actividades las tendría que hacer todo el mundo, para que nadie se sienta solo. (Ivet).
Hace unas semanas le hice una postal a Beatriz. Fue muy emocionante escribir el texto. Me sentí muy feliz ya que lo hice con mucho amor, además lo escribí con mis manos para ella. He aprendido que a través de una carta puedo enviar amor, felicidad y apoyo cuando alguien pasa por un momento complicado. (Martina).
Todo empezó cuando nuestra tutora nos dijo que teníamos que hacer una postal para un abuelo de una residencia. Yo al principio pensé que mi abuela se quedaría sin postal, porque yo voy muy lento trabajando. Pero no me rendí y seguí haciéndola con todo el amor del mundo. Al final la acabé y me sentí muy orgulloso de mí mismo, por no rendirme, y por esa persona que se merece mucho amor. (Santi).
Cuando me dijeron el nombre del abuelo apadrinado, que es Alonso, yo me quedé pensando: pero ¿y qué le voy a escribir o qué le voy a hacer? Me va a quedar todo muy mal… Hasta que me vino la inspiración y me dije: -pues voy a escribirle que espero que esté bien y que espero que le guste mucho lo que le he hecho. Lo hice todo con muchísimo cariño. Aunque yo no conozco a Alonso, espero conocerle algún día y darle un súper abrazo, cuando se acabe todo esto del Covid 19. Yo me sentí muy feliz y espero que él también cuando lo reciba. Pienso que este tipo de actividades son geniales, porque hay muchos abuelitos que no tienen familia y que se sentirán muy felices cuando reciban nuestros regalos. (Noa).